jueves, 21 de noviembre de 2013

EL DIARIO DE ANA FRANK

El diario de Ana Frank es la autobiografía de una niña judía de 13 años, hija de comerciantes alemanes, que se muda a Holanda para evitar las primeras persecuciones nazis. Pero la invasión de Holanda, en 1492, obliga a la familia de Ana Frank a esconderse en una casa antigua, tomando muchas precauciones, como no hacer ruido, no dejarse ver. En esta casa vivían 8 personas, que estaban juntas todo el día, durante más de dos años. En este tiempo, Ana se dedicó a escribir en su diario, al que llamó Kitty, todo lo que pasaba a su alrededor.
Kitty, el diario de Ana, fue un regalo por su cumpleaños, antes de mudarse. Por eso, la primera parte del diario nos enseña cómo era la vida en la Alemania de esa época. Los judíos tiene que llevar una estrella en la ropa, para diferenciarlos de los demás, también tenían que comprar en tiendas especiales, y no podían usar el tren ni bicicletas. Además, los niños tenían que estudiar en escuelas especiales para judíos y no tenían los mismos derechos que los demás. Sin embargo, a pesar de estas discriminaciones, tenían una vida feliz. Pero esto cambia cuando Hitler llega al poder, hay una profunda crisis económica y los judíos cada vez están en peores condiciones. Por eso Ana y su familia abandonan Alemania y se mudan a Holanda. Pero al poco tiempo, estalla la Segunda Guerra Mundial, y los judíos tiene que ocultarse. La familia de Ana se esconde en una Casa, con otros cuatro judíos más. A parte de contar lo que sucede, Ana también recopila cuentos y frases de otros escritores. Ella quiere que su diario se publique como una novela, por lo que decide reescribirlo, pero no puede acabar este trabajo, ya que descubren y arrestan a toda su familia. Ella, junto con su familia, es llevada a distintos campos de concentración, a los que solo logra sobrevivir su padre, Otto, que más tarde, cumpliendo el deseo de su hija Ana, decide publicar su diario.

Todo el mundo debería leer este libro alguna vez en su vida. Nos da una lección de humanidad, pues vemos las grandes injusticias y discriminaciones que las propias personas hemos cometido. Además, también nos enseña a luchar y no rendirse nunca, a pesar de tener todo en nuestra contra. Y todo está escrito por una niña de 13 años y su inocencia. Ana no escribe el libro para asombrar, ni para recibir una buena crítica, sino que lo escribe para sí misma, escribe lo que piensa de verdad, y lo que ve a su alrededor, todo lo que sucede durante esa época. Por eso el libro es totalmente objetivo.

                                                           


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