LA LLAVE DE SARAH

Hoy os traigo un libro muy especial, llamado "La llave de Sarah". Este libro habla de un hecho muy desconocido y ocultado, pero de una gran importancia, la Redada del Velódromo de Invierno. Esta Redada fue llevada a cabo por los franceses, en París, los días 16 y 17 de julio de 1942. Durante esos días, 9000 Gendarmes y policías recibieron las instrucciones del gobierno colaboracionista de detener a los judíos y llevarlos  al Velódromo de Invierno de París, sin importar la edad, ni enfermedades. Tras unos días, en penosas condiciones, viviendo en el Velódromo, los judíos fueron llevados a diversos campos de concentración.

Durante el primer día de arrestos, se llevaron al Velódromo a 12.884 judíos, muchos de ellos niños. Estos arrestros fueron muy crueles: los arrestados solo podían llevar una manta, un par de zapatos y dos camisas, además las familias fueron separadas y muchas de ellas nunca volvieron a reunirse.

Pero lo peor de todo de este hecho fue que los arrestados fueron caminando a lo largo de las calles parisinas, todos en fila india, arrastrando las pocas cosas que les dejaron llevarse, ante la mirada de todos los ciudadanos de París que, ya fuera por miedo, por cobardía, por indiferencia o como muchos de ellos, por interés (ya que ocuparían las casas que dejaban los judíos), permanecieron callados, observando las condiciones en que todos esos judíos, muchos de ellos amigos o vecinos suyos, eran conducidos al Velódromo, y más tarde, viendo las condiciones en que permanecían en ese lugar, y el olor que desprendía ese sitio.

"La llave de Sarah" nos habla de este acontecimiento desde dos perspectivas diferente, una desde la familia de Sarah Starzynski y otra desde la familia de Julia Jarmond.

Los Starzynski son una familia judía que viven en un buen barrio de París, en una buena vivienda, con gente acomodada, hasta que son arrestados. Cuando la policía llega, Michel, que tiene 4 años, se encierra en un armario por miedo, y su hermana Sarah, que tiene 10 años y pensaba que iban a volver enseguida a casa, lo cierra con llave, haciéndole prometer que no saldrá hasta que ella vuelva, y se lleva la llave. 

Pero la familia Starzynski, como los demás judíos, son encerrados durante cinco días en el Velódromo de Invierno, sin apenas comida o agua. Cuando pasan esos días, los envían al campo de Drancy, donde los separan como paso al traslado al campo de concentación de Auschwitz.

Desde que dejó la casa con su hermano encerrado en el armario, Sarah intentará por todos los medios escapar para salvar a su hermano, sin asumir que este ya este posiblemente muerto.

Por otra parte, Julia Jarmond, una periodista residente en París desde hace veinte años, comienza a investigar sobre la Redada del Velódromo de Invierno como ocasión del 60 aniversario de esta.
En esta investigación, conoce la historia de Sarah, y la lucha de esta niña de huir para lograr salvar a su hermano, encerrado en el armario con una llave que Sarah guarda cautelosamente. 
Pero lo que Julia no se hubiera imaginado nunca es que su investigación sobre Sarah le iba a lleagar a los Tézac, la familia de su marido. Resulta que los Tézac se mudaron a la casa que la familia de Sarah había dejado ese mismo año.

La llave de Sarah está ambientada en hechos reales, nos cuenta una historia fictica pero con una base histórica que, aunque sea difícil de aceptar, es real: la redada contra los judíos en París, en el año 1492. Sin embargo, a pesar de ser una novela histórica, no es para nada aburrida ni densa. La novela se centra en personajes con los que enseguida empatizas.
Me gustó mucho la doble narración, como dos familias completamente distintas acaban juntándose y la perspectiva del mismo hecho vista desde personas muy diferentes y desde distintas épocas. 
La historia te atrapa desde el principio, y no puedes dejar de leer.
Además, creo que este hecho es demasiado desconocido, la mayoría de los jóvenes no saben nada de él en la actualidad, como vemos al principio de la novela, cuando dos jóvenes periodistas que trabajan con Julia y que han vivido siempre en Francia no conocían ni la existencia de este acontecimiento. Y en mi opinión, no hay que esconder estos hechos, sino mostrarlos a todo el mundo, para evitar que en un futuro pueda volver a suceder algo parecido. 
Lo que menos me gustó, fue cuando Sarah por fin llegó a su casa y abrió el armario donde estaba su hermano. Fue muy triste, ya que aunque era lógico lo que se iba a encontrar allí, en el fondo esperabas que Michel hubiera conseguido salir de allí, que los nuevos inquilinos de la casa lo hubieran encontrado. Sin embargo, no fue así, y Sarah llegó demasiado tarde.